Yo la mañana
Yo la mañana que
buscan tus ojos.
Yo el amor en la
siesta de otoño.
Él da riqueza para
tus antojos.
Él bienestar, yo
locura, el asombro.
Tú, risa de rocío
sobre mi fuego,
tus miradas escarban
en mi alma.
Él tendrá tu presencia,
tus velos,
¡Yo soy quien,
desesperado te ama!
Haraiv